EL TEOREMA DE KATHERINE
Autor: John Green
Editorial: Nube de tinta
A Colin (un niño
prodigio que quiere ser un genio) le ha vuelto a dejar otra Katherine ( la
número diecinueve). Con el corazón roto, Colin está perdido, dolorido y algo
desorientado y es por ello que, cuando su mejor y único amigo, Hassan, le
propone coger el coche y hacer un viaje, acepta. Durante el trayecto conocen
nuevos paisajes y zonas y, cuando descubren que el duque Francisco Fernando,
aquel hombre que desató la I
Guerra Mundial, está enterrado en el pequeño pueblecito de
Gutshot, deciden parar para visitarlo. Pero Colin y Hassan encuentran algo más
en ese pueblo de lo que esperaban. Allí, al entrar en una tienda, conocen a una
chica muy interesante, Lindsay Lee Wells, que, además de dependienta era la
guía que enseñaba la tumba. Su madre, Hollis (dueña de una fábrica de hilos de
tampones en la que trabaja todo el pueblo), ofrece un trabajo a Colin y a
Hasan, aparte de alojamiento en su casa; así que, deciden quedarse un tiempo en
el pueblo. Mientras entrevistan a los habitantes para conocer su historia y así
ganarse el sueldo, conocen a nueva gente, empiezan a crecer personalmente, a
vivir nuevas experiencias y a disfrutar de la vida, Colin intenta averiguar qué
puede haber fallado en todas sus relaciones para que lo hayan tenido que dejar
y empieza a crear un teorema para saber cuánto durarán las relaciones. La
historia poco a poco comienza a dar un inmenso giro: descubren que la frábrica
que da de comer a todo el pueblo en realidad está arruinada, pero Hollis, por
pena, entierra toda la producción que no vende y sigue pagando a sus empleados;
Colin deja el teorema; y acaba de pareja con Lindsey.
Lo primero que me
gustaría decir es que clasifican a este libro por debajo de otros de este autor
y la verdad, yo pienso que está totalmente a la altura de “Bajo la Misma Estrella ” o
“Ciudades de Papel”, sólo que de una forma totalmente distinta.
La historia me ha
llamado mucho la atención, sobre todo, por los personajes, porque son
originales y muchas veces ves reflejada la sociedad en ellos y cómo unos hacen
que otros vean diferentes puntos de vista, además explica cosas muy complejas
de la vida cotidiana de una manera que resuelta muy simple.
Lo que también me ha
gustado es que te hace reflexionar sin quererlo y bueno, el humor inteligente
que hay siempre en los libros de John Green.
Y por supuesto, la idea
de un teorema que prediga el futuro de las relaciones, fue una idea genial.
Desde que decidió empezarlo, estaba deseando llegar a la parte en la que lo
terminaba, aunque en realidad pensaba que si el autor hubiera descubierto el
teorema y realmente se cumpliese, para el mundo real, sería un tremendo caos.
Lo recomiendo a todo el
mundo y me gustaría que lo disfrutasen tanto como yo lo hice.
Nerea González – 4º ESO B